viernes, 21 de enero de 2011

Cuéntame un cuento...

Érase una vez un país con muchos secretos por descubrir…               
Un día en el pueblo, llegó al castillo que estaba más allá de las colinas, un mago llamado Trey.
El castillo era conocido como “Tolemac”, era un sitio donde antiguamente se hacían experimentos con unos seres fantásticos sacados de un cristal mágico que inventaron los científicos.
Tras haber pasado 555 generaciones, desde el año 1125, esos seres todavía existían en algún lugar del pueblo.
El día más esperado del año, que era cuando las campanadas empezaban a sonar a las 12 de la noche, y comienza el nuevo año, el 1881 hubo un relámpago muy fuerte, acompañado de un gran viento que apagó todas las velas a todo el pueblo dejándoles sin luz.
La gente miraba por las ventanas, de repente vieron como si fuera una serpiente de fuego, y a medida que se iba acercando la serpiente la gente estaba aterrorizada, pero pese a eso pudieron observar que no se trataba de ninguna serpiente sino de aquellos seres fantásticos de los que a todos les habían hablado cuando eran pequeños.
Estaban todos juntos y giraban sobre sí mismos emitiendo una luz gigante.
Según decía la tradición estos seres solo venían cuando alguien necesitaba ayuda o como en este caso todo un pueblo. Después de darse cuenta la gente de que se trataba de esos seres, todos se pusieron muy contentos.
En el pueblo había cada día menos gente porque era aburridísimo vivir allí y la gente cada día estaba más triste, por lo que los jóvenes se iban a la ciudad, y el pueblo poco a poco se iba convirtiendo en un pueblo fantasma, pero Gorki, un niño de 15 años, que no se resignaba a aceptarlo, quería luchar contra la historia, su propia historia.
Gorki estaba seguro de que estos seres habían venido en respuesta a sus plegarias para ayudar a su pueblo en el que había nacido y en el que hace algún tiempo habían vivido tiempos muy felices.
De repente se le acercó un gnomo y le dijo que no estuviera triste, que todo había acabado y que empezaría a ser feliz.
Le dijo que extendiera sus manos, y el gnomo dio un gran salto hacia el cuello del niño y le colgó un cristal del cuello que brillaba más de lo que nunca antes había visto.
Este cristal dijo el gnomo, nos lo entregó un mago llamado Trey hace ya 555 generaciones, cuando nosotros estábamos tristes. Con este cristal puedes hacer realidad tus sueños, puedes transportar a personajes del pasado y del futuro y meterlos en tu propia historia.
Este cristal es para ti, porque nosotros y ano lo necesitamos por que entre los personajes que vinieron, uno de ellos nos enseñó a vivir y ayudar a los demás espero que a vosotros os ayude del mismo modo.
Seguro que cuando ya no lo necesitéis os lo pedirán desde otra parte del mundo.
Gorki se dio cuenta de lo que le habían contado en tantas ocasiones como si fuera una leyenda, se había hecho realidad.
Ahora en el 2027 en los anuncios de televisión aparece su página web
¡Atención, en caso de peligro / tristeza!
www.gnomos.-xx.com   


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